martes, 7 de diciembre de 2010

¿SABEMOS LO QUE COMEMOS?

LA PERCA DEL NILO
El mero es uno de los pescados más apreciados en nuestra cocina, y ha sido también siempre uno de los más caros. Y, sin embargo, si vamos al supermercado o a una pescadería a comprar, a menudo veremos que nos lo ofrecen en abundancia forma de unos magníficos “filetes de mero” a un precio más que asequible. Lo que a menudo se etiqueta como “filetes de mero” y que podemos encontrar a menos de 9 €/Kg. es otro pescado, muy probablemente perca del Nilo, importada del Lago Victoria, en medio de África. En el Estado Español, el consumo semanal de perca se sitúa alrededor de las 150 toneladas.

BREVE BIOGRAFÍA DE LA PERCA DEL NILO
La que actualmente se exporta a cualquier parte del mundo proviene del Lago Victoria, donde fue introducida en los años 50. El Victoria es el lago tropical más grande del mundo y sus aguas son compartidas por tres países (Tanzania, 51%; Uganda, 43%; Kenia, 6%). Desde el punto de vista de riqueza piscícola, representa –o representaba- una diversidad excepcional a escalera planetaria. Esta era la situación durante la primera mitad del siglo XX, cuando la escasa pesca con métodos tradicionales no suponía una agresión sobre el medio natural, se encontraba integrada y regulada por el sistema social tradicional de clanes, y se comercializaba a nivel local como pescado fresco, ahumado o secado al sol. Este pescado representaba la base proteica en la alimentación de las poblaciones locales y regionales. En los años 50, se producen unos acontecimientos clave en el proceso de transformación de
los ecosistemas del lago. Después de un largo periodo de debate y oposición,
la perca del Nilo fue introducida al lago Victoria, se dice que por un funcionario colonial en temas de pesca.

CONSECUENCIAS SOCIOECONÓMICAS
Antes de la explosión de la perca, los pescadores tradicionales eran mayoritariamente
propietarios de sus canoas y artes de pesca. Trabajaban predominantemente por cuenta
propia, y venían su producto a pequeños procesadores o comerciantes, sobretodo mujeres.
El pescado se vendía fresco, ahumado o secado al sol, a los mercados locales o próximos, dentro de los tres países. Esta cadena de comercialización estaba integrada en el sistema tradicional de castas, y los consejos locales eran los encargados de controlar la pesca así como de regular posibles abusos. Entre otros, limitaban el número de pescadores por cada comunidad teniendo en cuenta los recursos de cada zona, establecían y hacían respetar las vedas de cría y velaban por el uso de técnicas de pesca respetuosas con el entorno (Owino, IUCN). Mientras que los pescadores eran en su mayor parte hombres, las mujeres participaban en la preparación y comercialización local del pescado. Por otra parte, para los habitantes de las riberas del lago Victoria, y de gran parte de los territorios de los tres países, el pescado constituía la principal fuente de proteína de su dieta.

Cambio de modelo
Todo esto cambiaría a partir la introducción de la perca. Los inversores externos, tanto nacionales (inversores de la capital, funcionarios o empresarios de otros ámbitos) como extranjeros (europeos, israelitas y asiáticos) que, financiados por bancos internacionales de desarrollo y apoyados por agencias de desarrollo del primer mundo, verían una magnífica oportunidad de negocio basada en la exportación de filetes de pescado a países con mayor poder adquisitivo.

En resumen, al desaparecer la ordenación social tradicional sobre la pesca, se ha producid ola pérdida de soberanía alimentaria de los pescadores locales respeto a su capacidad de control sobre los precios, el procesado y la distribución del producto. De esta manera, la mayor parte de los beneficios económicos que ha comportado el paso de un comercio local a una industria exportadora ha ido a parar a manos extranjeras. Cada día, 2 millones de personas al mundo rico comen perca del Nilo. Esta cantidad cubriría las necesidades básicas de proteína de una tercera parte de la población desnutrida alrededor del lago (15 millones de personas)

CONSECUENCIAS MEDIOAMBIENTALES
La destrucción medioambiental del lago Victoria es, tristemente, un buen ejemplo de un estadio adelantado de degradación crónica y permite visualizar hasta qué punto la introducción de especies no-autóctonas y la explotación piscícola intensiva de un medio natural con finalidades exportadoras puede llegar a alterar un ecosistema que durante cientos de años había alimentado de forma equilibrada las poblaciones locales. Esta situación se debe a varios factores, que han afectado gravemente el ecosistema del lago, pero también sus alrededores: deforestación, residuos industriales, agricultura, pero muy especialmente la introducción de la perca del Nilo.

Pérdida de biodiversidad
Se considera que la extinción de cientos de especies de cíclidos asociada al aumento espectacular de la biomasa de perca a partir de los años 70 es el ejemplo más dramático de extinción de especies vertebradas del siglo XX. A finales de los años 60, estas especies autóctonas suponían un 83% de la masa y la perca, un 0,5%. Quince años más tarde, la perca representaba más del 80% de la pesca (Balirwa). Datos recogidos a finales de los años 1990 indican que dos tercios de las más de 300 especies de cíclidos del lago podrían haberse extinguido o estar a punto de hacerlo.
La Pesadilla de Darwin, excelente documental del que os dejo un resumen

http://www.youtube.com/watch?v=Zke8LkGAA_A

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